La leche y la práctica deportiva

El esfuerzo, la superación, el entrenamiento, el cuidado... todos estos valores están presentes cada día en la vida de un deportista. Son muchos los aspectos a tener en cuenta cuando en nuestra vida introducimos el hábito del deporte. Concienciados de la importancia del mismo, y acompañando un estilo de vida saludable, la alimentación es un aspecto muy cuidado en la vida de un deportista.


Los productos lácteos son una fuerte importante de proteínas ya que ayudan a aumentar y conservar la masa muscular. Después de un ejercicio de resistencia es conveniente el aporte de proteínas de digestión rápida y lenta, ambas presentes en la leche de vaca.


La leche de oveja es un alimento que cada vez más deportistas incluyen en su dieta, ya que contiene una alta densidad de nutrientes, especialmente proteínas, calcio y fósforo en cantidades muy superiores a la leche de vaca.


La rehidratación, sobre todo después de los ejercicios de resistencia es fundamental. Varios estudios afirman que la leche desnatada es una bebida más efectiva para la rehidratación después del ejercicio que las bebidas que se comercializan para deportistas, debido a la mayor retención de fluidos asociada a su consumo y por aportar una cantidad similar de carbohidratos en forma de lactosa que la que presentan las bebidas específicas para los deportistas.


La leche también nos proporciona la vitamina B12, que es uno de los principales nutrientes que contribuye a la formación normal de los glóbulos rojos, que intervienen en los procesos de transporte de oxígeno, fundamental para los deportes de fondo.


Por todo lo anterior, los productos lácteos se pueden considerar muy importantes en la dieta de los deportistas, ya que aportan componentes nutricionales básicos que contribuyen a una dieta equilibrada.